¡Ya tenéis las canciones!
La BSO del Espino de este año, el 2007 aquí:
Hala... no me pongo a hablar del espino porque ocuparía todas las entradas del blog del mes de Julio. Le dedicaba una o dos entradas a cada persona, a cada pensamiento... uffff...
Os dejo las fotos (página patrocinada por Candy & Sugus):
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Hola. No es bueno que una niña se siente sola ¿me puedo sentar contigo?
Vale.
Uy... tu no eres de aquí ¿de dónde vienes?
De Brasil -dice lentamente, pues no sabe muy bien el español- estoy estudiando un curso de ingeniero de materiales... no se si sabes lo que és.
Sí, lo sé: también soy ingeniero. (pausa) Umm... ¿Porqué llevas un jersey en verano?
Es que en Brasil es invierno ahora.
[...]
La verdad es que no me apetecía desayunar solo hoy, y tampoco es que sea muy lanzado, pero me atreví a iniciar una conversación porque la Yisela estaba un poco perdida en la cafetería de industriales y yo ¡ya estaba harto de desayunar solo!.
Noooo... no seais marujos. No lo hice para ligar ¿porque sois así? Ainssss jajaja. Llevo unos días un poco "plof", así que me acordé de unas palabras que dijo Laureano en el Espino "¿Porqué hacer bien las cosas, repartir amor, si todos vamos a recibir el mismo premio? Por uno mismo, porque sino te hundes por dentro". También las palabras "Arriesgar y hacer las cosas en conjunto", de Marta. Aun así seguía "plof", ya que no es fácil encontrar a gente estos días con los que estar.
Menos mal que ha venido mi mami a casa. A veces Dios te manda ayuda cuando tu pones de tu parte.
He dormido 12 horas después de dormir 5 horas diarias durante una semana.
Y porque tenía que trabajar... que sino duermo 20.7
Un sacerdote no es una persona perfecta. Comete sus errores y tiene defectos. Pero no creo que un sacerdote lo sea cualquier persona. Ni siquiera pienso que todos los sacerdotes puedan ser llamados sacerdotes.
Sé que no lo parece, pero conozco a muchos sacerdotes debido a que he estado en muchos sitios: desde el Opus Dei, Jesuitas, Redentoristas, Pasionistas (este último es el único que ha visitado mi casa). Y voy a atreverme a comentar sobre lo que es para mí un sacerdote.
Un sacerdote es una persona que tiene el Amor como objetivo en su vida. Quiere fomentarlo y es nexo de unión cuando hace falta el amor. Comete errores, pero sabe que debe pedir perdón. Debe tener muy claro que NO es un ser superior al que se debe servir: mas bien está hecho para servir (recordad a Jesús lavando los pies a los discípulos). Erróneamente se puede confundir el "magisterio de la Iglesia" con que ellos son superiores.
Un sacerdote debe abarcar todo tipo de personas. No debe centrarse en un "grupo preferido". Debe saber dar oportunidades a todos, confiar en ellos y apoyarles.
Lo que no debe hacer un sacerdote es rechazar a personas. Aunque estas personas lo rechacen también, él debe dar ejemplo de lo que es, y para lo que vive: debe ser una persona excepcional, que demuestre su propio objetivo en la vida: amar.
Un sacerdote no debe cometer el peor pecado: hablar mal de otros, querer hundir a otras personas para ocultar sus defectos.
Si un sacerdote excluye a gente, si se hace así mismo superior, si no sabe pedir perdón o si actúa con dejadez ¿acaso debo considerarle sacerdote porque tiene un "título"?
Menos mal que conozco a buenos sacerdotes, y ellos saben bien que son para mi héroes a seguir.
Vaya paliza de día que llevo. Acabo de volver del Espino* y me he echao una siesta de 6 horas. Mi frigorífico se quedó sin luz, luego todo en el estaba podrido... ¡limpieza y Burrikin!.
Tomándome la hamburguesa (es mi comodín cuando no tengo comida en el frigo), me pongo a ver una de las series anime (Bokura ga ita). En ella se habla de la necesidad de proteger.
Lo que más me gusta en el Espino es la sensación de proteger a la gente. No tanto protegerla físicamente sino proteger su corazón. Saber que estoy cerca de tanta gente que quiero proteger me llena de felicidad.
Pero por contra, la única persona que no protejo es a mí mismo. Me hundo fácilmente cuando me entero de que alguien "no me traga". Sobre todo cuando soy consciente de que no he hecho las cosas con maldad, sino por amor. Esta es la única pregunta que no he sabido responder: quererme a mi mismo.
Y entonces aparece la eterna pregunta ¿será que la felicidad no la puedo encontrar sólo conmigo mismo? ¿será que requiero alguien permanentemente a quien proteger?
Marta Iglesias dijo las palabras más importantes que he oido en el Espino: Primero hay que arriesgar y luego hacer las cosas en comunidad. Admiro a Marta, pues hace todo con humildad y paciencia.
Panda de payasos...
Sólo hay un sitio que ha podido igualar a mis amigos de Alemania: y ha sido Vigo. ¿A qué me refiero por igualar? Pues quizás he viajado a muchos lugares, pero nunca se habían reunido tantos porque yo aparecía. ¿Lo han hecho por mi? No, no es eso: Ellos se reúnen de normal, pero sentirme como uno más, como si hubiese estado allí de por vida, pues no es normal.
Ya sea por cómo me han tratado (Milu y Nuria, no se cómo agradecérselo... pero es que no he podido estar mejor. Es más, deberían haber estado peor conmigoooooo, porque ahora voy a ser mas pesaoooo). O cómo, siendo yo una persona, tenía 14 casas en las que alojarme.
¿No me va a gustar Vigo? A parte de que la ciudad me ha encantado, es que la gente me ha ganado (y me ha salido un pareado). En la foto podeis ver a David ¡el patriarca del camino de Santiago!, a Milu y Virginia con su hermano.
Hala... y más tarde Anable, Manu, Noemi, Isaac y Laureano. Debo decirle a Laureano que me apunte a todas las actividades que haga Vigo, porque con semejante tropa... Mejor no os enseño las fotos tontas que hicimos (a parte de que me quedé sin batería, que sino habría miles).
Bueno, exceptuando a Marta (que ya se casa el año que viene), Jacobo es el último amigo que me quedaba por casarse. Esta vez me tuve que ir a Vigo, de allí a la Catedral de Tui y luego a Portugal. Debe ser la boda más impresionante de las que he estado.
Eso sí: frente a todo, me he alegrado de que Jacobo me invitase. Todavía recuerdo nuestro sistema de estudio: él siempre hacía los problemas antes, con mucha prisa. Yo, se los pedía y hasta que no entendía el porqué, no dejaba pasar ningún número. No me gusta inventar, pero tampoco tengo la mente para sacar un problema desde cero. En definitiva: Él hacía y yo arreglaba.
En la boda, a pesar de estar malito, estaba bien rodeado y encantado: Me encontré a Tomás, con el que teníamos interminables charlas en su cuarto del colegio mayor (sobre todo hablando de mujeres... jajaja)
Ésta es la foto con el grupo de amigos de Jacobo de San Sebastián.
Nunca antes me habían hecho semejante descripción "Es que tu eres un francotirador - me decía Juan - actúas sólo".
¿Y qué remedio me queda? No se actuar en grupo, porque haga lo que haga, la gente piensa que me quiero hacer jefe o que quiero hundir a alguien. ¿Es culpa de la gente? No lo creo, porque han sido muchas las ocasiones y diversas las personas con las que me ha ocurrido.
Normalmente soy visto como Sergio sugus: el que hace cosas infantiles y reparte caramelos. ¿Puede Sergio Sugus responsabilizarse de algo? "No, no está capacitado. Él debe aprender, y nunca dejar de aprender". Cuando he aprendido lo suficiente, y me he esforzado más que nadie, paso a ser un "objeto peligroso al que hay que apartar. Hay que apartarlo porque no confiamos en él: es peligroso porque existe un 100% de posibilidades de que se equivoque"
Podría ser: Le pongo mucha ilusión a las cosas... tanta que puedo agobiar a cualquiera. Cuando quiero hacer algo me planteo (1) hacerlo yo solo o (2) compartirlo con los demás. Cómo se debe plantear una base de comienzo, siempre comienzo yo sólo y luego lo planteo a los demás para que lo modifiquen. Normalmente el paso 2 se convierte en lo contrario: es un rechazo a que yo haya propuesto algo por mi mismo. También he de reconocer que planteo cosas en ámbitos donde nadie los plantea y que no son abarcados por nadie. Intento ocupar un espacio vacío.
El Francotirador...
Pese a haber aprendido lo suficiente, querer exponer a los demás porqué he llegado a mis conclusiones... querer compartir las cosas que me ilusionan... nunca he podido hacer esto en público. Abarcando todo lugar donde actúo: Iglesia, trabajo, música... siempre me han parado los pies en el punto en el que digo "Ahora quiero hacer algo yo".
No soy una persona que quiera ser jefe de nada. Más bien, sí que me gustaría ser jefe para demostrar que no debes imponerte sobre ninguna persona: Igualarte. ¿Será esto por lo que nunca consigo nada? ¿Será porque los seres humanos necesitamos alguien que imponga su criterio de forma carismática pero sin razón?. Al final, me doy cuenta que valen mucho más las palabras que los actos. Puedes decir cosas impresionantes, pero actuar al contrario de lo que dices: Así te ganas a la gente, así la gente te sigue. Se demuestra con los medios de comunicación : sólo dicen, no hacen, pero todos los siguen.
Y de esta forma, nadie confía en mí. Seguiré siendo Sergio Sugus, el infantil que da miedo que haga algo. Del que no se sabe lo que puede llegar a hacer porque nunca le han dejado.
Eso sí: me queda mi faceta de francotirador... ¿te hace un café?
...tomado de la Wikipedia...
Sugus es una marca de caramelos suaves masticables de la empresa Wrigley. Su origen hay que buscarlo dentro de la empresa chocolatera suiza Suchard, que los creó en 1931. Son de forma cuadrada, y sus medidas son de 2 cm de lado y 7 mm de espesor, incluyendo el envoltorio. El nombre viene de las lenguas escandinavas, suge, que significa lo mismo que chupar. Los hay de diversos sabores: limón, naranja, piña, frambuesa y cereza, indicados según el color del envoltorio (amarillo, naranja, azul, lila y rojo, respectivamente), que es característico del caramelo. El envoltorio clásico (que mide 6,3 por 4,5 cm) envuelve al caramelo respetando la forma paralelepípeda del mismo, mostrando en color blanco los nombres Sugus (minúscula), Suchard y el nombre del sabor (ambos en mayúscula), ocupando todo el envoltorio. Dentro del envoltorio se halla un pequeño y blanco papel liviano de 6,3 por 1,9 cm que rodea al caramelo evitando que se pegue al envoltorio exterior, por ejemplo, en momentos de excesivo calor.
El nombre, a pesar de ser una marca, se convirtió en el nombre de este producto. Éste apareció en el mercado bajo otras marcas, con distintos nombres, pero a todos se les llama popularmente sugus.
Esos caramelos se conocen en Colombia con el nombre de Frunas que también es una marca. Véase Historia
Actualmente existe también su versión en el mercado de Comercio Justo, llamada Fruit3, en referencia a los sabores de frutas y su relación directa con productores del tercer mundo. Puede ver más información sobre estos caramelos alternativos en la siguiente web: Caramelos Fruit3
¿Sabes dar las gracias?
Gracias se da a alguien que tiene un detalle contigo. Porque se acordó de ti, y tú, sabiéndolo, quieres decirle que le quieres, porque se acordó de ti.
Dar las gracias puede tener más valor que el propio hecho por el que se da. Dar las gracias es decir "recibí el amor que me dabas".
Poca gente da las gracias cuando te acuerdas de ellos. Eso sí: el que se acuerde, es una persona que sabe recibir el amor, y sabe devolvértelo.
A veces... hay que estar atento a dar las gracias. Porque hay gente que hace cosas por ti, pero no le sale bien y quizás no llegues a saber lo que se preocupó por darte un poco de amor.
Por cierto... ya que lees esto: Gracias.
A mi las cosas no me pueden pasar de una en una. No: me pasan de tres en tres, y en el mismo día. Dos de ellas eran estas:
Llevaba desde hace años queriendo organizar el grupo de chavales en el Espino. Organizar no es hacer de dictador, es queriendo hacer algo diferente... que todos, sin nadie al mando, tengan opinión; y que todos se sientan iguales. Después de muchos meses queriendo hacer las cosas con antelación para que no salga mal... en el último momento lo anulan. Así... sin más. A tomar por saco mi Espino.
También me iba apuntar a hacer el camino de Santiago... y ¡cataplof! Pues tampoco.
Y una tercera cosa que... cataplof.
Las cosas, cuando me vienen de 3 en 3 es cuando les pongo mucha ilusión. Para mi desgracia, soy una persona que no genera confianza. Cuando alguien me pide un favor sencillo... suele llamarme para saber si lo he cumplido. Nadie me pide que me responsabilice de algo, excepto si ese algo no tiene importancia si se hace o no.
Observando mi ambiente, creo que he podido sacar la conclusión de que debo cambiar de ambiente: Si estoy en un sitio donde cuando hablo, no se me escucha; cuando propongo, se lo toman a risa, siendo mi idea no es menos estúpida que el resto de las propuestas. Cuando mi opinión resulta molesta ¿no debería cambiar de ambiente?
Y si me pongo a buscar dónde se me tiene en cuenta, desinteresadamente, saco la conclusión que no es en mi ambiente habitual. Ea, pués, ¡cambia de ambiente!. Tampoco puedo, pues tengo compromisos que quiero cumplir.
Al final... tengo que tener paciencia y hacer los cambios poco a poco. ¡Con lo impaciente que soy!
Hoy apenas salí de casa. Pero debe ser el día que con más gente he hablado. Me apetece contártelo, por que es un día especial.
Todo empezó ayer Viernes. Por alguna razón, me llevé hablando horas con una amiga, con la que no me canso de hablar y me encanta (sí: puedo llegar a cansarme, pero en este caso no).
Esta mañana llevé a mi hermano a Felix Boix para que saliera hacia el campamento. Me encontré con Ángela, que andaba super-agobiada, pero con una sonrisa cariñosa, como siempre. Y también con Eva, que me encanta cómo me dice el mogollón que me quiere (Eva, como se entere tu novio... jajaja).
Y me vuelvo a casa. Ahora sí: voy a usar el teléfono fijo, que ya estoy harto del messenger. Emilio me empezó a alegrar la mañana, porque hablemos de cosas tristes o alegres, nos reímos un rato (espero que vengas a mi casa, Emilio). Luego... ya puestos ¡a mi amigo Juanma!. Juanma es de Burgos, vivió conmigo cuando alquilábamos un piso en San Sebastián, y siempre ha sido un buen amigo. Me ha enseñado que debería llamar de vez en cuando a la gente... y más concretamente con los que hablo más a gusto.
Y sigo.. pues ahora las chicas: Lupe, que no hablaba con ella desde que tuvo a su hijo Manuel. Tengo muchas ganas de verla. Y luego a Sofía por su cumple, que es la abuelita más joven de espíritu del mundo mundial. No sé su edad ni me importa, porque me ha enseñado que ser joven está por dentro, y no en los años que llevas encima ¡como me gustaría ser como ella de abuelito!.
Y por último, Maca vino a mi casa a hablar. Y aunque ya se lo he dicho a ella, me repito al decir que he tenido una tarde increíble, puesto que la que hablaba era la "Maca" que habla como ella le gusta ser. Y me ha enseñado que es una persona activa, de esas poquitas que hay, que avanzan en la vida poco a poco pero constantes (me refiero a las artes) y que debo confiar cuando rezo.
Y podría hablar de más gente, como todos lso que me han escrito en el messenger.... estoy encantado con el día. No me esperaba recibir tanto amor en un sólo día.
Os quiero.
Sugus de piña licencia Creative Commons.
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